Fue un enfrentamiento militar entre los ejércitos de la República Roma -dirigidos por Julio César- contra una confederación de tribus galas -lideradas por Vercingétorix, jefe de la tribu de los arvernos-. Se dice que fue entre Septiembre y Octubre del año 52 a.C.
La batalla fue ganada por los romanos. Alesia fue uno de los grandes éxitos militares de Julio César. También fue la destrucción del ejército galo.
lunes, 4 de junio de 2012
Ejército de Aníbal: paso por los Alpes
El ejército de Aníbal se dirigía a Italia y para ello tenían que atravesar la cordillera de los Alpes.
Hacía mucho frío. Miraran donde miraran, no había ni un solo rincón que no estuviera helado. Los días eran soportables, pero por las noches cientos de hombres se hallaban muertos por las extremas temperaturas. Y no solo los hombres, los animales también. Después del sufrimiento, el ejército de Aníbal consiguió llegar a su destino...
Hacía mucho frío. Miraran donde miraran, no había ni un solo rincón que no estuviera helado. Los días eran soportables, pero por las noches cientos de hombres se hallaban muertos por las extremas temperaturas. Y no solo los hombres, los animales también. Después del sufrimiento, el ejército de Aníbal consiguió llegar a su destino...
domingo, 27 de mayo de 2012
miércoles, 18 de abril de 2012
La muerte de Rómulo
Rómulo nación en el 771 a.C. , hijo del dios Marte y hermano de Remo -a quien mató por pasar los límites de su ciudad, Roma (fundada en el monte Palatino)-.
Los cielos estaban cubiertos de nubes grandes y negras. Empezaba a llover y se veían destellos de luz blanca por lo lejos. Rómulo pasaba por las solitarias calles de Roma. La tormenta se acercaba, cada vez más fuerte y más peligrosa. La tormenta fue provocada por el dios Marte, su padre, quién lanzó un rayo contra él, arrebatándole la vida. Rómulo murió en 716 a.C.
Los cielos estaban cubiertos de nubes grandes y negras. Empezaba a llover y se veían destellos de luz blanca por lo lejos. Rómulo pasaba por las solitarias calles de Roma. La tormenta se acercaba, cada vez más fuerte y más peligrosa. La tormenta fue provocada por el dios Marte, su padre, quién lanzó un rayo contra él, arrebatándole la vida. Rómulo murió en 716 a.C.
jueves, 22 de marzo de 2012
domingo, 11 de marzo de 2012
Un remolino y una monstruo
Ulises se disponía volver a Ítaca. Fueron a buscar al profeta ciego Tiresias, que les indicó el camino de vuelta a casa. Éste les avisó que no se acercaran a la isla de Trinaeria ni que tocaran las vacas del dios Sol.
Ulises se encaminó, y les advirtió a sus hombres de los peligros que encontrarían; el primero serían las sirenas, cuyas voces melodiosas atraían a los marinos. La isla estaba cubierta de cadáveres de hombres que escuchaban sus voces y caían en la trampa.
Para que no les ocurriera lo mismo, Ulises tapó los oídos de la tripulación con cera y ordenó que le ataran al mástil. Pasado eso, vieron una nube de humo negro y se acercaron a la isla de Escila. Escila es un monstruo de doce patas y seis cabezas. Junto a esta isla se situaba el Caribdis, que era un remolino que absorbía las aguas y luego las lanzaba hacia arriba. Pasando por aquel estrecho, oyó a unos cuantos hombres de su tripulación gritar. Escila se los había comido.
Ahora se aproximaban a la isla de Trinacria. El profeta ciego les advirtió de que no pasaran por ahí, pero su tripulación insistían quedarse allí. Ulises accedió pasar allí una noche, con la condición de que no tocaran las vacas del dios Sol. Esa misma noche hubo tormenta y se tuvieron que quedar un mes en aquella isla. La comida se les acabó, y la tripulación se comió las vacas.
Se fueron de la isla cuando la tormenta amainó. Pero pronto se juntaron nubes y se encontraron en medio de una tempestad. Una gran ola rompió el casco del barco. Ulises fue el único superviviente.
Ató el mástil a la quilla con una soga, y empezó a remar, pero el mar le arrastraba al Caribdis. Se agarró a una rama al pasar junto al acantilado. Nueve días después las olas le arrastraron a la isla de Ogigia donde la ninfa Calipso le rescató. Calipso se negó a dejarle marchar y estuvo ocho años en aquella isla con Calipso, hasta que los dioses ordenaron que le dejara libre. Construyó un bote en el que navegó durante diecisiete días.
Ulises se encaminó, y les advirtió a sus hombres de los peligros que encontrarían; el primero serían las sirenas, cuyas voces melodiosas atraían a los marinos. La isla estaba cubierta de cadáveres de hombres que escuchaban sus voces y caían en la trampa.
Para que no les ocurriera lo mismo, Ulises tapó los oídos de la tripulación con cera y ordenó que le ataran al mástil. Pasado eso, vieron una nube de humo negro y se acercaron a la isla de Escila. Escila es un monstruo de doce patas y seis cabezas. Junto a esta isla se situaba el Caribdis, que era un remolino que absorbía las aguas y luego las lanzaba hacia arriba. Pasando por aquel estrecho, oyó a unos cuantos hombres de su tripulación gritar. Escila se los había comido.
Ahora se aproximaban a la isla de Trinacria. El profeta ciego les advirtió de que no pasaran por ahí, pero su tripulación insistían quedarse allí. Ulises accedió pasar allí una noche, con la condición de que no tocaran las vacas del dios Sol. Esa misma noche hubo tormenta y se tuvieron que quedar un mes en aquella isla. La comida se les acabó, y la tripulación se comió las vacas.
Se fueron de la isla cuando la tormenta amainó. Pero pronto se juntaron nubes y se encontraron en medio de una tempestad. Una gran ola rompió el casco del barco. Ulises fue el único superviviente.
Ató el mástil a la quilla con una soga, y empezó a remar, pero el mar le arrastraba al Caribdis. Se agarró a una rama al pasar junto al acantilado. Nueve días después las olas le arrastraron a la isla de Ogigia donde la ninfa Calipso le rescató. Calipso se negó a dejarle marchar y estuvo ocho años en aquella isla con Calipso, hasta que los dioses ordenaron que le dejara libre. Construyó un bote en el que navegó durante diecisiete días.
domingo, 4 de marzo de 2012
Campamento de los griegos en la playa
El campamento griego no era grande pero sí muy seguro. Lo vigilaban día y noche. Dormían en tiendas de campaña. El campamento se dividía en dos: una la zona más segura y cerca al mar, donde se encontraban los Dioses; la otra, donde se encontraban los soldados, menos segura porque estaba más cerca a la muralla.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)